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Viaje Al Día Mundial De La Juventud: Una Peregrinación Enfocada En La Misericordia

By Obispo Charles C. Thompson
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Obispo Charles C. Thompson

Presento este artículo antes de mi primera participación en el Día Mundial de la Juventud que se celebra en Krakow, Polonia, del 25 al 31 de Julio.  ¡Estees un “Día” bastante largo! Saliendo el Sábado 23 de Julio, me uniré a otros 48 miembros de nuestra Diócesis junto a millones de personas de alrededor del mundo para este grandioso evento. El PapaFrancisco, por supuesto, seguramente será uno de los aspectos más destacados de la experiencia.

El Día Mundial de la Juventud es un evento internacional Católico con un enfoque en la fe y en la juventud. El último Día Mundial de la Juventud se llevó a cabo en Río de Janeiro en el 2013. Como muchos saben, Krakow fue la ciudad natal de Karol Wojtyla, quien más tarde se convirtió en el Papa Juan Pablo II y ahora San Juan Pablo II. No es de extrañar, ya que este Día Mundial de la Juventud es llevado a cabo durante el Jubileo de la Misericordia, que el tema del 2016 es tomado de Mateo 5: 7; "Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia." Por lo tanto, la celebración de la Divina Misericordia de Dios permeará nuestra oración y actividades. De hecho, las tres figuras del Día Mundial de la Juventud incluyen la imagen de Jesús Misericordioso (la devoción a la Divina Misericordia), Santa María Faustina Kowalska y San Juan Pablo II. Sin dudas, tendremos mucho que considerar en relación con las obras corporales y espirituales de la misericordia.

Como el Papa Francisco ha repetido en varias ocasiones, debemos estar atentos a los jóvenes y a los ancianos. Losjóvenes y los jóvenes adultos tienen un papel vital que desempeñar en la misión de la Iglesia en proclamar el mensaje del Evangelio. Ellos no son el futuro de la Iglesia, sino los miembros jóvenes de la Iglesia aquí y ahora. Ellos no son meramente queridos, sino que necesarios. Noten que yo sigo usando el pronombre "ellos." A los 55 años, aunque todavía me considero "joven" entre los obispos, soy muy consciente de que pertenezco a una generación que precede a la llamada "generación y" o a la "generación del milenio." Dicho esto, sin embargo, estoy seguro de que voy a ser capaz de mantenerme al ritmo de todos en el transcurso de las actividades del Día Mundial de la Juventud.

Se espera que uno se acerque al Día Mundial de la Juventud como una experiencia de peregrinación. Aunque incluye una gran cantidad de diversión y la ocasión de conocer a gente de alrededor del mundo, el Día Mundial de la Juventud es primeramente acerca del discipulado misionero y la conversión. Profundamente arraigado en el enriquecimiento espiritual y la devoción religiosa, el Día Mundial de la Juventud ofrece una oportunidad única para un encuentro personal cada vez más enriquecedor con Jesucristo. Este es el corazón de la evangelización, un tema muy cercano y querido al corazón del Papa Francisco. También es esencial para lo que significa ser Católico. El discipulado auténtico y la conversión requieren que todos y cada creyente Cristiano esté centrado en Cristo, en lugar de estar centrado en sí mismo o poner a otros antes que Dios. Este es el corazón mismo de la enseñanza de la Iglesia sobre la Eucaristía como "fuente y cumbre" de todo el culto, el servicio y la actividad entre sus miembros. Está en el mantener el equilibrio o las prioridades apropiadas en que nos damos cuenta más plenamente de la alegría y la paz de la Divina Misericordia.

Estoy deseando compartir con ustedes mi experiencia del Día Mundial de la Juventud después de regresar a la Diócesis. Mientras tanto, los invito a orar juntos la Oración Oficial del Día Mundial de la Juventud2016:

 

Dios, Padre misericordioso, que has revelado tu amor en tu Hijo Jesucristo, y lo has derramado sobre nosotros en el Espíritu Santo, Consolador.

Te encomendamos hoy el destino del mundo y de todo hombre y mujer” 

Te encomendamos en modo particular los jóvenes de toda lengua, pueblo y nación. Guíales y protégeles en los complejos caminos de hoy y dales la gracia de poder cosechar abundantes frutos de la experiencia de la Jornada Mundial de la Juventud en Cracovia.

Padre celestial, haznos testigos de tu misericordia. Enséñanos a llevar la fe a los que dudan, 
la esperanza a los desanimados, el amor a los indiferentes, el perdón a quien ha obrado el mal y la alegría a los infelices. 

Haz que la chispa del amor misericordioso, que has encendido dentro de nosotros se convierta en un fuego que transforma los corazones y renueva la faz de la tierra.

María, Madre de Misericordia, ruega por nosotros. San Juan Pablo II, ruega por nosotros.
AMEN